La Constitución Española de 1978, pendiente sin lugar a dudas de una profunda revisión, proporciona el marco legal sobre el que se articula la organización política y territorial del que es denominado como Estado social, de derecho y democrático. Esta nomenclatura teórica, aunque a grandes rasgos y de forma superficial puede considerarse cierta, choca en muchas ocasiones con una realidad bien distinta.
Si nos paramos a reflexionar sobre los derechos y libertades esenciales que el ciudadano o bien la propia sociedad en su conjunto debieran disfrutar, nos daremos cuenta de las restricciones e insuficiencias que acompañan en su aplicación práctica a nuestro sistema democrático, donde la participación ciudadana, más alla de su irregular visita a las urnas, queda relegada a un segundo plano. No obstante las voces del establishment político nos recuerdan a diario, lo afortunados que somos al disfrutar de una total libertad de expresión (no tanto de pensamiento) por medio de unos medios de comunicación plurales, al tiempo que se nos permite reunirnos y manifestarnos, eso si cada vez de forma más controlada como consecuencia de la Ley de Seguridad Ciudadana.
Aunque todo esto puede aseverarse, en ocasiones no es más que un espejismo; la libertad de información termina en el momento que los grandes grupos mediaticos dueños de tal o cual periódico tienes determinados intereses que salvaguardar. En ese momento, surge la omisión, tergiversación o sin ambages la más rancia manipulación, que podemos observar diariamente en nuestro país.
Este hecho es denunciado desde diferentes espacios que no se hallan bajo el férreo control de los principales poderes, principalmente desde la web como podéis ver en los siguientes ejemplos.
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La viñeta gráfica: Manel Fontdevilla |
GOBIERNO LOCAL Y DEMOCRACIA
PARTICIPATIVA ¿ES POSIBLE?
Los gobiernos locales se formalizan
a partir del resultado de las elecciones municipales, cumpliendo el contenido
del artículo 23 de la Constitución, en cuanto a la participación mediante
representantes libremente elegidos en elecciones periódicas por sufragio
universal.
¿Qué características tiene este
sistema?
a) Periodicidad de las elecciones.
Los mandatos “representativos” tienen una duración máxima de cuatro años.
b) Sufragio universal. Todas las
personas tienen derecho a ejercitar libremente sus opciones y elegir a sus
representantes. En la sociedad actual, en la que la población procedente de
otros países se incrementa notablemente, esa “universalidad” lo es menos.
Afecta únicamente a una parte del universo, a aquellas personas que tienen la
condición de ciudadanas, dejando de lado
varios miles de personas emigrantes
que sólo son consideradas fuerza de trabajo.
c) Papel fundamental de los partidos
políticos. A pesar de que en las elecciones municipales es donde más se
manifiestan opciones formadas por agrupaciones de electores que, en muchos
casos, llegan a obtener representación en el Consistorio. Esta
“partidificación” de la vida política municipal tiene algunas consecuencias
absurdas en cuanto a las alianzas locales, ya que es posible encontrar
gobiernos locales formados por partidos que, en la esfera autonómica o estatal,
son férreos opositores.
A pesar de ello, la elección democrática de los
representantes no agota, ni mucho menos, las posibilidades de ejercer el
derecho a la participación. Existen otros canales, otras fórmulas tal como
se ha podido comprobar en diversas experiencias españolas, europeas y
sudamericanas, entre otras, en el último decenio.
No se trata sólo de buscar canales
de participación directa en la gestión de los partidos (listas y elecciones
primarias abiertas) y en la toma de
decisiones (referéndum, ILP) para legitimar la acción de gobierno, en base a su
apertura en aspectos más o menos esenciales de sus políticas, dejando de lado
la importancia de mejorar el propio sistema representativo. Se trata de
trabajar ambos ámbitos: el de la calidad
de la representación política y
el de la calidad de la participación
directa en procesos concretos alrededor de políticas concretas.
LA PARTICIPACIÓN CIUDADANA EN EL
ÁMBITO LOCAL
Se hace necesario definir bien las
acciones a realizar a partir de un plan
previamente establecido con objetivos claros y determinados e indicadores capaces de medir el grado de consecución de
dichos objetivos, así como capaces de medir la eficiencia de los recursos
empleados. Para ello es necesario partir de un diagnostico suficientemente
consensuado por los diferentes agentes del proceso: políticos, técnicos,
asociaciones y ciudadanía. El enfoque que se propone pretende dedicarle tiempo
a la reflexión y al conocimiento tanto a
la fase de diagnóstico como a las de diseño y elaboración de propuestas, y
a las de ejecución, seguimiento y
evaluación.
El esquema que sigue a continuación,
forma parte del trabajo realizado durante el mes de octubre de 2003 en las
Jornadas organizadas por el Ayuntamiento de San
Sebastián y la Federación Española de Municipios y Provincias sobre
Planes Estratégicos de participación.
Aunque en el
plan de participación propuesto como modelo se establecen cuatro fases concretas: Diagnóstico compartido, Propuesta de actuación, Programación, Evaluación de resultados; en
nuestro caso los alumnos seguirán un diseño más simple, dentro de la temática
elegida, realizaran una descripción y valoración
crítica de la situación actual (en referencia al funcionamiento o falta de
infraestructuras y servicios del municipio de Navalcarnero) para más tarde
elaborar propuestas de mejora.
Algunos de los temas que podrían ser tratados son los siguientes:
1. La organización municipal.
Definir el funcionamiento de la
administración local teniendo como objetivo central la satisfacción de los
derechos y las necesidades de la ciudadanía
1.1. Diagnóstico de los procesos
participativos o de los sistemas de relación con la ciudadanía desde cada
departamento municipal
1.2. Sistemas de información y
atención a la ciudadanía. Medios de comunicación municipal
1.3. Plan de formación específica
del personal técnico y político
1.4. Seguimiento y mejora de la
actividad administrativa. Revisión de los circuitos y procedimientos de
“fabricación” de los servicios municipales
1.5. Incorporación de las
iniciativas ciudadanas a la actividad municipal
1.6. Sistemas de defensa de la ciudadanía
(quejas, sugerencias, defensor del ciudadano...)
1.7. Revisión de los roles
“político” y “técnico” en la administración local.
1.8. El ámbito de participación
ciudadana como promotor de la transversalidad y de la calidad de los procesos
participativos
2. Ciudadanía y asociaciones
2.1. Tipo de asociaciones.
Diagnóstico: potencialidades y debilidades
2.2. Políticas de fomento de las
asociaciones: subvenciones, cesión de espacios...
2.3. Mejorar la capacidad interna de
las asociaciones y sus funcionamientos democráticos
2.4. Promover la formación de redes
asociativas y programas de actuación coordinada
2.5. La ciudadanía no organizada.
Plan para incorporar personas individuales en los procesos de elaboración de
las políticas públicas.
2.6. Agencia de promoción del
voluntariado, el asociacionismo y la participación.
3. Posibles actuaciones
3.1. El proceso de elaboración del
Plan de Actuación Municipal
3.2. Plan de usos de los equipamientos
culturales sociales y deportivos. Especial estudio sobre las posibilidades de
gestión cívica de los mismos
3.3. Medios de comunicación e
información locales
3.4. Programas de formación del
personal técnico municipal
3.5. Reglamento de participación
ciudadana
3.6. Presupuestos participativos, o
participación en la elaboración del presupuesto
3.7. La organización de la Fiesta
Mayor o fiestas mayores o programas culturales. Propuestas de coordinación
interasociativa y con el ayuntamiento para la elaboración del programa y su
ejecución.
3.8. El plan de desarrollo
comunitario de una zona concreta.
3.9. Planes integrales (para toda la
ciudadanía)
3.10. Planes sectoriales: juventud,
igualdad, cooperación, mujer, infancia...
3.11. Programas de apoyo a la
gestión asociativa (más allá de la subvención: formación, asesoramiento,
mejorar la autonomía asociativa...)
3.12. Bases para la concesión de
ayudas y subvenciones municipales
3.13. La ciudad educadora
3.14. La ciudad de los niños y niñas
3.15. El sistema informático
municipal. La página web
3.16. Coordinación y colaboración
con otras experiencias: foros de debate y de intercambio
3.17. El proyecto de mejora
urbanística de un determinado barrio.
3.18. La construcción de un
equipamiento
3.19. La gestión de un programa
social (Plan joven, ayuda a personas
en riesgo de
exclusión, sectores concretos....
Éste, o cualquier otro esquema
pueden servir. Lo importante es una acción positiva que avance propuestas en el
ámbito interno de la organización municipal y en el ámbito externo de la
ciudadanía y las asociaciones.
Para más
información respecto de los Planes Estratégicos de participación, consultar el
Taller “Construimos un plan estratégico”, Begoña Oltra (Coord.) Jornadas organizadas por la Federación
Española de Municipios y Provincias y el Ayuntamiento de San Sebastián.
Octubre 2003